El día internacional de la mujer y la niña en la ciencia busca promocionar y visibilizar el papel de las mujeres en el ámbito científico
Desde la ciencia ciudadana queremos reivindicar la importancia de la participación diversa en la ciencia
Artículo originalmente publicado en el suplemento de ciencia y tecnología de Heraldo de Aragón Tercer Mileno, el 15 de febrero de 2024. Un artículo de Judith Bielsa, Olga Varela y Lucía Moreno.
El pasado 11 de febrero se conmemoró el Día Internacional de la mujer y la niña en la Ciencia, declarado en 2015 por Naciones Unidas, con la intención de inspirar a las futuras generaciones de científicas. Este día nos brinda la oportunidad de reflexionar sobre los desafíos y logros de las mujeres en la ciencia. Por eso desde Ibercivis consideramos fundamental reconocer y celebrar la contribución de las mujeres y las niñas que han aportado valor a la ciencia a través de su participación en proyectos de ciencia ciudadana en España y en el mundo.
La importancia de fomentar la participación de las mujeres y las niñas en actividades de ciencia ciudadana tiene una doble cara. Por un lado, afianza la equidad en el acceso al conocimiento de modo que las mujeres y las niñas tengan garantizado un acceso igualitario y justo a todas las actividades que pueden enriquecer su desarrollo personal y profesional. Esto es algo que, lamentablemente, no es una realidad universal. Por otro lado, es también necesario que la ciencia sea diversa, que incluya nuevas visiones del mundo y que no se limite a la monoculturalidad predominante y a la centralidad de los puntos de vista masculinos y occidentales que han dominado la ciencia tradicionalmente. En este sentido, diversificar las visiones en la ciencia –y en particular, introducir la mirada femenina– permitirá encontrar nuevos problemas, plantearse nuevas preguntas y formular nuevas formas de ofrecer respuestas, elementos que solo pueden redundar en el avance científico y social.
Lo anterior es aún más relevante en ciencia ciudadana, pues este modo de hacer ciencia está abierto a escuchar voces diferentes y a incluir a todo el conjunto de la sociedad. Esta apertura, facilita la introducción de las necesidades de las comunidades diversas en el desarrollo de una ciencia que aspira a la participación significativa de todos los sectores de la sociedad. Siendo así, la participación de más mujeres y niñas en estas actividades se convierte en una garantía de esa equidad de la que hablamos antes, puesto que generar conocimiento –o hacer ciencia– supone que se ha podido adquirir previamente.
Pero entonces surge una pregunta clave: ¿Cómo incentivar la participación de mujeres y niñas en la ciencia ciudadana? Señalemos tres aspectos: 1. Impulsar capacidades transversales haciendo ciencia ciudadana, 2. Identificar barreras y desafíos para la participación y 3. Formar alianzas estratégicas.
- Impulsar capacidades transversales haciendo ciencia ciudadana: No cabe duda de que la educación juega un papel fundamental en la promoción de la participación de las mujeres en la ciencia. Incentivar la participación desde el aula no solo impulsa el desarrollo de capacidades para la investigación, también fortalece otras capacidades como el pensamiento crítico, el trabajo en equipo y/o la responsabilidad, entre muchas otras. Algunas estrategias para involucrar a más niñas y mujeres en la ciencia incluyen la creación de programas educativos que destaquen el valor de sus contribuciones y visibilicen a las mujeres científicas. Además, es importante ofrecer espacios seguros donde las mujeres y las niñas puedan explorar sus intereses científicos, desarrollar habilidades prácticas y establecer redes de colaboración y trabajo con otras mujeres científicas. Desde Ibercivis, junto con otras instituciones, desarrollamos proyectos como “Aulacheck”, “FuenAragón” o “Servet”, entre otros, que han sido concebidos con un destacado componente educativo. Con ellos hacemos una invitación directa a las niñas y al profesorado para aprender haciendo investigación científica. También es esencial abordar los estereotipos de género arraigados en la educación y en la sociedad, que pueden desalentar y alejar a las niñas de seguir carreras científicas. En resumen, invertir en la educación de las niñas en ciencia es fundamental para impulsar la participación equitativa y para avanzar hacia un futuro más inclusivo y diverso en la ciencia.
- Identificar barreras y desafíos para la participación de mujeres y niñas en ciencia ciudadana. Además de los desafíos anteriormente mencionados, existen otras barreras significativas para la participación plena de las mujeres en la ciencia ciudadana. Entre ellas, las responsabilidades familiares y domésticas que recaen de manera desproporcionada en las mujeres y que limita el tiempo y los recursos para que puedan involucrarse en actividades científicas. El equilibrio entre el cuidado de la familia y el compromiso con la investigación resulta especialmente difícil para las mujeres, ya que a menudo se espera que asuman roles de cuidado adicionales. Datos recientes del Instituto de las Mujeres, agrupados en la base de datos “Mujeres en cifras 2023”, muestran que la proporción de horas diarias que las mujeres españolas dedican a labores de cuidado y a las tareas del hogar sigue siendo muy superior a las que dedican los hombres. Por ejemplo, el porcentaje de mujeres que cocina y/o realiza tareas domésticas todos los días en el hogar es de un 84.5%, mientras que el porcentaje de hombres en estas tareas solo llega a un 41,9%. Esta diferencia en la asignación en las tareas, reduce el tiempo disponible para el ocio y para las actividades sociales y culturales. Para paliar esta desventaja, desde la ciencia ciudadana pueden plantearse metodologías que faciliten la participación de todos, como es el caso de “Vigilantes del aire”. En este proyecto, el tiempo requerido para participar puede adaptarse fácilmente a distintos ritmos de vida, por lo que no interfiere significativamente en la rutina diaria de los participantes. Otra barrera que disminuye la participación de las mujeres en ciencia ciudadana puede verse asociada a la escasez de proyectos sobre aspectos que afectan unicamente a las mujeres. El desarrollo de proyectos como “Transform” o “Isala” son un gran avance en este sentido. El primero estudia la salud de las mujeres con endometriosis, usando metodologías de ciencia ciudadana. El segundo mapea el microbioma vaginal y las fluctuaciones hormonales, con el objetivo de profundizar el conocimiento de este campo tan importante como poco estudiado. Es significativo que, en ambos casos, la participación de las mujeres ha sobrepasado las expectativas y los indicadores iniciales.
- Formar alianzas estratégicas: Finalmente, para incentivar la participación es necesario construir redes que involucren activamente a todo tipo de agentes sociales. Es relevante incluir, tanto el sector privado como el público, las organizaciones civiles y no gubernamentales, para garantizar una inclusión real que represente la diversidad de nuestra sociedad y generar una ciudadanía consciente e informada. Se requieren alianzas que ayuden a mejorar la inclusión de todos en las actividades científicas. En esta línea, la Asociación Europea de Ciencia Ciudadana (European Citizen Science Association, ECSA) creó el Grupo de trabajo sobre “empoderamiento, inclusividad y equidad” con el objetivo principal de cocrear recursos y facilitar el intercambio de conocimiento y experiencia sobre inclusión, equidad y empoderamiento en la investigación participativa.
Como vemos, aunque persisten barreras que limitan la participación plena y equitativa de las mujeres en la investigación y la innovación, hemos logrado también avances significativos. Este día no sólo es un recordatorio de la necesidad de seguir cambiando los estereotipos de género en el campo científico, sino también una llamada a la acción para promover la igualdad de oportunidades y empoderar a las mujeres y niñas en todas las disciplinas científicas. En este camino, la ciencia ciudadana puede tener verdaderamente un papel fundamental.
Judith Bielsa, Politóloga y gestora de proyectos en la Fundación Ibercivis
Olga Varela, Dra. en Lógica y Filosofía de la Ciencia, investigadora y gestora de proyectos en la Fundación Ibercivis
Lucía Moreno, Politóloga y gestora de proyectos en la Fundación Ibercivis, miembro del Grupo de Trabajo «Empoderamiento, Inclusión y Equidad» de la ECSA