RadoHOW se ha desarrollado en cinco zonas españolas: Zaragoza, Galicia, Madrid, Cantabria y Salamanca
El proyecto midió las concentraciones de gas radón en hogares y lugares de trabajo, donde pasamos la mayor parte del tiempo
RadoHOW es un proyecto innovador que se ha dedicado a estudiar el gas radón, un gas natural inodoro y radiactivo que emana del subsuelo debido a la desintegración del radio y del uranio presentes en las rocas. Este gas puede acumularse en edificaciones, representando un riesgo para la salud de las personas que lo inhalan durante períodos prolongados. El proyecto se centró en medir las concentraciones de gas radón en hogares y lugares de trabajo, ya que son los espacios donde pasamos la mayor parte del tiempo.
Los participantes del proyecto, ubicados en varias comunidades autónomas de España, recibieron detectores de gas radón para colocar en sus hogares y lugares de trabajo. Activaban los detectores cuando estaban presentes en dichos espacios, permitiendo obtener mediciones continuas durante tres meses. Este enfoque permitió obtener una visión más completa de la exposición al gas radón en diferentes entornos.
Los resultados de las mediciones mostraron variaciones significativas en las concentraciones de gas radón entre las distintas regiones y entre hogares y lugares de trabajo. Se identificaron factores como características geológicas, arquitectónicas y demográficas que influyeron en estas variaciones. Además, se observó que ciertas ocupaciones presentaban mayores concentraciones de gas radón en el lugar de trabajo, como los trabajadores de la minería.
1. ¡El método RadoHOW
El proyecto RadoHOW se propuso dos objetivos fundamentales en su metodología de trabajo. En primer lugar, buscó crear una comunidad RadoHOW en cinco provincias españolas, incluyendo Zaragoza, Galicia, Madrid, Cantabria y Salamanca. Esta diversidad geográfica ha permitido obtener datos representativos de diferentes regiones. En segundo lugar, se propuso medir la concentración de gas radón a la que se exponen los participantes en su vida diaria, tanto en sus hogares como en sus lugares de trabajo. Para lograrlo, se proporcionaron detectores de radón a cada participante, los cuales midieron la concentración promedio en ambos ambientes cuando estaban presentes.
2. RadoHOW y la ciencia ciudadana…
El proyecto RadoHOW ha integrado la ciencia ciudadana de manera tanto online como presencial. En línea, se llevaron a cabo reuniones regulares con la comunidad RadoHOW para co-crear la metodología, entender los protocolos y dar seguimiento al proyecto. Además, se realizaron reuniones individuales con cada participante para interpretar los resultados y co-crear estrategias de mitigación. De igual manera se organizó un evento final para compartir información y resultados, así como para discutir estrategias de mitigación y difusión. También se aprovecharon eventos como el Día Europeo del Radón y actividades de difusión en universidades y grupos específicos, como espeleólogos, para sensibilizar sobre los riesgos del gas radón.
3. RadoHOW y los resultados generales de nuestros participantes en…
Los resultados generales del proyecto RadoHOW revelaron variaciones significativas en las concentraciones de gas radón entre los participantes de diferentes regiones y entre sus hogares y lugares de trabajo. Por ejemplo, en Zaragoza y Galicia, las concentraciones fueron bajas tanto en hogares como en el trabajo, mientras que en Cantabria y Salamanca, las concentraciones en el trabajo fueron más altas. Estas variaciones se han atribuido a las diferencias geológicas, arquitectónicas y demográficas entre las regiones, así como a ciertos oficios que exponen a los trabajadores a mayores concentraciones de gas radón.
4. Estrategias co-creadas por la comunidad RadoHOW
Una parte fundamental del proyecto RadoHOW ha sido la co-creación de estrategias de mitigación personalizadas por parte de la comunidad participante. Esto incluye acciones para ventilar y modificar los inmuebles, así como medidas complementarias con mediciones profesionales. Además, se promueve la sensibilización y la difusión sobre los riesgos del gas radón y las medidas de protección disponibles. En los lugares de trabajo, se fomenta el contacto con las unidades de prevención de riesgos laborales, mientras que en los hogares se alenta a compartir información con la comunidad y abrir el debate sobre el tema.
5. ¡RadoHOW sigue!
El proyecto RadoHOW no concluye con la obtención de resultados, sino que continúa con nuevos objetivos. Entre ellos se incluye llevar un seguimiento de los casos con mayores concentraciones de gas radón, aumentar la muestra de participantes para obtener resultados más representativos y seguir difundiendo y concienciando sobre la problemática del radón. Además, se busca apoyar la legislación vigente que obliga a medir este gas en puestos de trabajo, contribuyendo así a mejorar las condiciones de salud y seguridad laboral.