El pasado 9 de mayo comenzó la preparación de las muestras recibidas de nuestro proyecto Vigilantes del Aire, gracias al trabajo de los científicos del IPE (el Instituto Pirenaico de Ecología) trasladados hasta el Laboratorio de Paleomagnetismo de la Universidad de Burgos. Las muestras se preparan para su análisis en este laboratorio, donde conoceremos los datos de acumulación de metales pesados en la superficie de las hojas que hemos recibido.
Durante los meses de octubre, noviembre y diciembre de 2020, 5000 macetas de fresal fueron repartidas por todo el país para que durante esta estancia, las hojas recogieran muestras de metales pesados presentes en el aire. De estas 5000 macetas, el proyecto ha recuperado muestras más de 2700, lo que supone todo un éxito para Vigilantes del Aire porque más de la mitad de las plantas han servido a su propósito y los participantes en el proyecto han contribuido con su compromiso para que los resultados sean útiles y significativos.
Así, durante las próximas semanas se realizarán todas las pruebas necesarias para analizar las muestras recibidas y conocer la cantidad de metales pesados que albergan estas hojas. Con los datos obtenidos podremos trazar un mapa de la containación por metales pesados en el país, gracias a los participantes en este proyecto de ciencia ciudadana.
Gracias a todos los participantes en el experimento que cuidaron las macetas en sus domicilios y que han contribuido a medir la concntración de metales pesados en sus pueblos y ciudades, así como a los embajadores regionales que contribuyeron a los repartos por todo el país.