La contaminación de suelos de la Almozara, en el punto de mira ciudadano. Autor: Fundación Ibercivis

[et_pb_section bb_built=”1″][et_pb_row][et_pb_column type=”4_4″][et_pb_text _builder_version=”3.17.6″]

Los vecinos del barrio de la Almozara se implicarán en la localización de los vestigios de contaminación que aún quedan en sus suelos, heredados del pasado industrial de esa zona de Zaragoza. Y los habitantes de la capital aragonesa podrán también contribuir a digitalizar el patrimonio arquitectónico y arqueológico de la ciudad aportando sus fotografías. Los dos proyectos de ciencia ciudadana elegidos en la I Convocatoria Ibercivis, a la que optaron 28 candidaturas, lo harán posible. Estas dos iniciativas contarán con apoyo técnico, difusión y la financiación de 2.000 euros, gracias al convenio de la Fundación Ibercivis y el Ayuntamiento de Zaragoza para el fortalecimiento de la ciencia ciudadana en dicha ciudad.

Contaminación en los suelos de la Almozara

‘Conociendo la herencia de contaminación ambiental de la Almozara’, presentado por Oscar Pueyo, es uno de los dos proyectos seleccionados. Su objetivo es localizar y cartografiar áreas afectadas por la contaminación heredada de la presencia de la industria química en el barrio zaragozano de la Almozara, y dar a conocer este problema a sus actuales habitantes. Posteriormente se procederá a identificar y clasificar los agentes contaminantes de estas localizaciones con el fin último de poder tratarlos adecuadamente. La implicación de los vecinos del barrio de La Almozara -conocido popularmente durante décadas como el barrio de La Química por los zaragozanos- será fundamental para identificar zonas en las que pudiera haber contaminación por residuos de la antigua industria química y que ahora pueden estar ocultos bajo las nuevas edificaciones. Con este proyecto se pretende, por un lado, dar a conocer esa parte de la historia del barrio, desconocida por muchos de sus actuales vecinos y, por otro, facilitarles criterios de identificación de esos suelos para que puedan participar localizando posibles focos de contaminación y comunicando esa situación con el fin de articular medidas para su control.

Modelos arquitectónicos

Por otra parte, ‘Luz para las sombras’, presentado por Iván Morte, pretende la digitalización de patrimonio arquitectónico y arqueológico de Zaragoza, contando con la colaboración de los ciudadanos, que subirán fotografías de puntos de interés realizadas con su móvil a una plataforma ‘online’ que catalogue los puntos de interés. El proyecto se articulará a través de convocatorias abiertas, periódicas y populares en las que cualquier persona pueda contribuir tomando y enviando fotografías para la creación de modelos arquitectónicos de alto valor histórico, reivindicándolos como patrimonio de nuestra ciudad. La mayor o menor contribución a los distintos modelos que vayan surgiendo funcionará como síntoma de mayor o menor aceptación de los participantes, pudiéndose establecer acciones de gamificación (juego y recompensas) como una competición entre los diferentes espacios identificados a través de los votos recibidos.

Para desarrollar estos proyectos, Ibercivis proporcionará asesoramiento técnico -a través de equipamiento científico y técnico desde los Laboratorios César del Centro Etopia de Arte y Tecnología, o con formación específica-, difusión del proyecto -para dar a conocer el proyecto o para cubrir necesidades de reclutamiento de voluntarios- y financiación de 2.000 euros por proyecto para que pueda salir adelante. Los proyectos deberán estar completados a fecha 30 de junio de 2019, cuando se darán a conocer sus resultados. La Fundación Ibercivis ofrece asimismo su apoyo a los proyectos no seleccionados.

El comité de expertos para la selección de proyectos estuvo formado por Ana Quintana, directora de Programas, Contenidos y Comunicación de la Fundación Zaragoza Ciudad del Conocimiento; Pilar Perla, coordinadora del suplemento de ciencia, tecnología e innovación de Heraldo de Aragón, Tercer Milenio; Alejandro Rivero, investigador del Instituto de Biocomputación y Física de los Sistemas Complejos (BIFI); y Alfonso Tarancón, catedrático de Física Teórica de la Universidad de Zaragoza e investigador del BIFI.

Esta sección se realiza en colaboración con el Observatorio de la Ciencia Ciudadana en España, coordinado por la Fundación Ibercivis.

Ver artículo en Tercer Milenio

[/et_pb_text][/et_pb_column][/et_pb_row][/et_pb_section]

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *